​​​​​​​Mi nombre es Karin Benoni y soy autora del libro Cuerpos Contaminados: La Influencia Espiritual del Sexo. Esta obra forma parte del proyecto ZIP (Zona Intimitatis Personalis) y está disponible exclusivamente dentro de este proyecto.

Para que comprendas el propósito del ZIP, considero esencial ofrecerte una breve introducción al contexto en el que esta obra fue concebida. Además, deseo explicarte cómo el ZIP puede contribuir significativamente a diversos aspectos de tu vida, especialmente en el ámbito de tus relaciones amorosas.

Me casé en 1998. A lo largo de los años, sucedieron muchas cosas.

A principios de 2012, descubrí una traición de mi marido que, en ese momento, me paralizó de una manera tan intensa que no tuve ninguna reacción.

Y solo descubrí la infidelidad porque la mujer con la que me engañó llamó a mi casa buscándolo. Cuando tuvo la certeza de que estaba hablando conmigo, su esposa, empezó a decir muchas cosas muy desagradables sobre él.

Por la noche, cuando él llegó del trabajo, lo cuestioné sobre todo lo que había sucedido, sobre lo que aquella mujer había dicho. Se defendió de una manera tan ilógica e incoherente que, en ese momento, supe con certeza que absolutamente todo lo que ella había dicho era verdad.

Y tuve esa certeza no solo por la forma en que intentó defenderse, sino porque ella mencionó cosas muy íntimas que solo él y yo sabíamos.
Como dije, no tuve ninguna reacción más allá de escuchar lo que él decía y observarlo.

Desde aquel acontecimiento hasta 2020, pasaron 8 años.
En 2020 conocí al hombre con quien traicionaría a mi marido.
Fueron 4 años de una relación tormentosa, llena de peleas, mentiras, desacuerdos y desconfianza.

A pesar de estar casada, mi amante y yo llegamos incluso a planear una boda. Los detalles de esta historia están dentro del libro, pero observa cómo un sentimiento de venganza, disfrazado de justicia, puede debilitar nuestras convicciones.

Digo esto porque el adulterio estaba completamente fuera de mi radar; nunca había considerado realmente esa posibilidad. Pero en el momento en que esta trampa me fue presentada por el mundo espiritual, no solo la consideré, sino que la tomé como una forma de justicia. Entonces, en el plano espiritual, todo se concretó.

Pasé a engañar a dos personas: a mi amante, que nunca supo que yo estaba casada, desde el principio hasta el final de nuestra relación, y a mi marido, que jamás sospechó ni se dio cuenta de que fue traicionado durante 4 años.

Me sorprendió mi capacidad de engañar a dos hombres al mismo tiempo. Digo esto no para enorgullecerme, porque no hay ninguna gloria en el adulterio, sino para constatar que el mal también nos capacita y nos lleva a usar nuestra inteligencia al máximo para un propósito totalmente equivocado.

Pero no sientas pena por él. Cuando estés dentro del proyecto ZIP, descubrirás que no era tan inocente como parece y que fue atraído hacia mí porque ambos estábamos siendo influenciados por el mismo espíritu. Así es como las personas equivocadas se unen: a través de influencias espirituales ligadas al sexo.

Cuando terminamos, pasé 4 días completos sumida en opresión.

Creía que realmente estaba sufriendo por la ruptura. Pensaba en él todo el tiempo, en lo que estaría haciendo, si ya estaría con otra persona, y eso me causaba un dolor inmenso. Lo peor era no entender por qué me sentía así, ya que estuve con él durante 4 años, y durante los últimos dos me esforcé mucho para que finalmente llegáramos al final, provocando peleas sin sentido solo para reunir el valor de terminar la relación.

Ya no sentía nada por él, pero no conseguía terminar la relación, algo me retenía. Y cuando lo lograba, hacía todo lo posible por volver con él. Mira qué locura todo esto.
Puedo decir que tuvimos suerte, porque muchas relaciones así terminan en tragedia.

Una tarde, en casa, viendo la televisión, en uno de mis pocos momentos de calma mental, de repente vino a mi mente el recuerdo de la pelea del final, algo que él me había dicho, y entonces tuve una horrible crisis de pánico, una sensación de muerte indescriptible.

Empecé a sudar frío, mientras mi corazón se aceleraba y sentía que me faltaba el aire. En ese momento, escuché una voz suave en mi oído que me pedía que orara, y eso fue lo que hice.
En aquel instante y en los días que siguieron, tuve una profunda experiencia espiritual de conocimiento y revelación.

Tuve una visión clara de los espíritus que estaban actuando en mi mente, trayendo sufrimiento con sutileza.

Así es como sucede. Estos espíritus actúan de una manera en la que no te queda otra opción más que pensar que todo lo que estás pasando o sintiendo es algo común a muchas personas. Al fin y al cabo, sufrir por amor parece ser lo natural.

Las personas lloran sus pérdidas, todos tienen su período de duelo por el fin de un matrimonio, un noviazgo o un compromiso. En realidad, eso es exactamente lo que estos espíritus obsesores quieren que creas.

A través de relaciones malogradas, estos espíritus traen depresión, ansiedad, conflictos e incluso la muerte. Y las relaciones son, sin duda, la puerta más accesible para ellos, porque existe una legalidad sexual que les permite actuar.
Existe un concepto disciplinario que estructura nuestra esencia espiritual y que incluso puede restaurar relaciones que parecen estar al borde del colapso.

En el ámbito cristiano, siempre se escucha que la mujer sabia edifica su hogar, pero ¿cómo actuar en una situación en la que tu esposo dice que va a abandonarte para estar con otra mujer, muchas veces incluso más joven que tú?

Oras, pides perdón a Dios, pero sientes que falta algo, porque Dios no responde tus oraciones, el cielo parece completamente cerrado para ti.

¿Cuántas mujeres conoces o has oído hablar de que fueron abandonadas por sus esposos? Otras que descubrieron que ellos incluso tenían una segunda familia.
Las historias son incontables, son tristes, y me solidarizo con cada una de esas mujeres, porque yo también estuve en el lado malo de la historia.

Puedo afirmar que cuando estás traicionando, lo último en lo que piensas es en si eso causará sufrimiento a alguien o no.
Por eso fue tan fácil para tu esposo abandonarte o para tu novio engañarte y sustituirte por otra.

Cuando estamos siendo influenciados, nos volvemos insensibles e ingratos.

Pero en el libro Cuerpos Contaminados y en la Master Class que forma parte del ZIP, exploro a fondo los fundamentos y las causas de por qué llegamos a este punto, tan negativamente influenciados por espíritus obsesores.
Un espíritu necesita un cuerpo para tener legalidad y estar en la Tierra. Por eso Jesucristo fue colocado en el vientre de María.

Los espíritus obsesores necesitan dos cosas para poder actuar en la vida de una persona: transgresión y un cuerpo.
El ser humano, por naturaleza, tiene una conciencia moral. Y esa conciencia no proviene de nosotros porque seamos buenos. No te engañes, no lo somos.

Y podemos considerar también la información de que ciertas regiones del cerebro, como la corteza prefrontal y la amígdala, están asociadas con la toma de decisiones morales y el procesamiento emocional. Estos sistemas ayudan a generar emociones como culpa, vergüenza y orgullo, que incentivan comportamientos éticos y regulan nuestras acciones.

Pero no es solo eso. El apóstol Pablo, en Romanos 2:14-15, explica que incluso los gentiles (no judíos), que no recibieron la Ley escrita de Moisés, tienen la "ley escrita en sus corazones".

Su conciencia da testimonio a favor o en contra de sus acciones, mostrando que Dios colocó un sentido interno de moralidad en todos los seres humanos. Con la caída de Adán y Eva, descrita en Génesis 3, el pecado entró en el mundo y el discernimiento moral humano se distorsionó.

Sin embargo, la conciencia moral permaneció, aunque dañada.

Según la Biblia, los seres humanos nacen con una conciencia moral porque fueron creados por Dios para reflejar Su naturaleza moral y para vivir en comunión con Él.
Incluso en un mundo caído, esta conciencia sigue siendo un recordatorio de nuestra origen divina y del llamado a vivir según los estándares de Dios.

Cuando esos estándares son quebrantados, automáticamente entregamos a los espíritus obsesores exactamente lo que necesitan: la legalidad para comenzar a poner en práctica sus planes de destrucción. A partir de ahí, ellos tienen un cuerpo y el derecho legal espiritual para actuar.

Digo "planes" porque son metódicos. No asustarán a su presa, sino que actuarán sutilmente, entregándote algo que en lo más profundo de tu ser deseas. Porque este ataque siempre llega en forma de satisfacción, ganancia y placer.
El objetivo final es poseer tu ZIP (Zona Intimitatis Personalis). Ese es el propósito del príncipe del poder del aire.

La expresión "aire" se refiere al dominio invisible o espiritual donde estas fuerzas operan, representando el espacio entre la mente del ser humano, el cielo y la tierra.

Las potestades (o poderes) forman parte de una jerarquía de fuerzas espirituales malignas. Actúan en los "lugares celestiales", es decir, en la esfera espiritual, intentando frustrar los planes de Dios y causar destrucción entre los seres humanos.

Y cuando hablo de destrucción de los seres humanos, no me refiero a guerras. Ellos quieren destruir a los hombres en su fundamento, que son las relaciones. Una casa sin cimientos puede derrumbarse con el viento más insignificante que la golpee, y lo mismo sucede con un templo. Tú eres el templo.

Tu ZIP (Zona Intimitatis Personalis) es la fortaleza de tu alma, y estos espíritus tienen como objetivo final tomarla de una vez por todas.

Debemos estar de acuerdo en que no todas vamos a poder resolver nuestros problemas emocionales solo con terapia. No la desaconsejo, pero tampoco la recomiendo como la única forma de tratar este tipo de problema, sobre todo porque las cosas espirituales se disciernen en el espíritu.

Cambiar patrones de pensamiento y comportamiento que han sido aprendidos y reforzados a lo largo de la vida no es una tarea rápida, lo sé. Muchas veces, las personas buscan terapia para lidiar con cuestiones como la ansiedad, la depresión o relaciones difíciles, pero descubren que esas dificultades van mucho más allá de creencias y hábitos antiguos, que hay algo que se ha perpetuado a lo largo de sus generaciones.

Le pasó a la abuela, a la madre y ahora a ella. ¿Y por qué la terapia no explica esto?

Porque es algo que debe resolverse en tu ZIP, no en un consultorio. La terapia, si decides recurrir a ella, puede ser un poderoso complemento. Aquí estoy hablando de resolver definitivamente tus cuestiones espirituales, porque es a partir de ellas que todas las cosas se materializan.

Piensa, ¿alguna vez has orado por un problema y has sentido el silencio de Dios? Como si los cielos se hubieran cerrado para ti.

Pero te digo que hay una razón por la cual, aunque el velo se haya rasgado y hoy tengamos acceso directo a Dios a través de la sangre de su hijo Jesucristo, muchas veces oramos y, en la gran mayoría de los casos, no somos escuchados o no escuchamos a Dios hablar. Créeme, Él habla.

Después de los acontecimientos pasados, fui guiada a través de una experiencia espiritual única, en la que aprendí lo que definitivamente puede hacernos ser escuchados por Dios.

Es algo que siempre ha estado ahí, frente a nosotros, pero hemos sido mal enseñados. Falta claridad.

Y creo firmemente que esto es lo que hace que muchas personas dentro del ámbito espiritual sean tan bendecidas y escuchadas por Dios. Observa que es un grupo muy selecto de personas.

Fue precisamente esto lo que me sacó del borde del abismo.
El proyecto ZIP nació a partir de mi experiencia, y Dios me dijo en lo más profundo de mi ser que esto debía extenderse a otras personas que están pasando por las mismas circunstancias en las que yo me encontraba.

¿Alguna vez te has detenido a pensar por qué algunas relaciones simplemente no funcionan, incluso cuando te esfuerzas tanto?
Peleas, celos, rupturas difíciles, esa sensación obsesiva y apego hacia alguien que sabes que no debería ocupar tanto espacio en tu mente.

Es como si hubiera algo más allá de lo que podemos ver, algo que influye en nuestras emociones y decisiones.

Fue a partir de este punto de partida que nació el ZIP – Zona Intimitatis Personalis. No es solo un proyecto, es una invitación para que observes las relaciones – y a ti misma – desde una perspectiva completamente nueva.

El corazón del ZIP es el libro “Cuerpos Contaminados – La Influencia Espiritual del Sexo”. Es el resultado de mucha reflexión, investigación y, sinceramente, de experiencias que viví y que me transformaron profundamente.

A lo largo de más de 200 páginas, abordo temas que van directamente a la raíz de los problemas, como la influencia de fuerzas espirituales en las relaciones, por qué tantos amores terminan fracasando y qué puedes hacer para salir de este ciclo.

Además, está la Master Class ZIP, que es una especie de guía para que puedas aplicar todo lo que está en el libro. No es solo teoría suelta; es algo que realmente puede marcar la diferencia en tu vida.

Y si te preguntas para quién está hecho esto, te diría que es para quienes están cansadas de sufrir en silencio. Para mujeres que buscan respuestas, pero también quieren un cambio. Que desean dejar de repetir los mismos patrones y, por fin, entender por qué el amor ha sido tan difícil para ellas.

Créeme, entiendo que a veces parece que el problema está en ti, pero muchas veces hay cosas que no vemos de inmediato.
Mi intención con el ZIP es ayudarte a identificar estas influencias y recuperar el control, tanto espiritual como emocional.

Si este mensaje resonó contigo, me encantaría que conocieras el proyecto.

¿Por qué no recomiendo solo terapias?
Puedes buscar tratamiento terapéutico para intentar comprender el fin de una relación o la complejidad de tu relación actual, pero solo a nivel intelectual, dentro de las convicciones humanas. Sin embargo, jamás lograrás tratar en sesiones de terapia las raíces, la causa espiritual de estos problemas.
¿Y por qué el ZIP es único?

El ZIP es más que un proyecto, es un viaje sin precedentes.
A diferencia de soluciones superficiales, explora las raíces espirituales que afectan tu vida amorosa y emocional. Es el único proyecto que aborda de manera directa y profunda temas como obsesores, legalidades espirituales y las influencias invisibles que pueden estar debilitando tus relaciones.

¿Qué encontrarás en el ZIP?

✅ Liberación espiritual: Identifica y elimina las influencias invisibles que sabotean tu felicidad.
✅ Autoconocimiento profundo: Comprende los patrones que afectan tus decisiones y transforma tu vida amorosa.
✅ Restauración emocional: Alcanza paz interior y encuentra la fuerza para superar el sufrimiento.
✅ Relaciones elevadas: Prepárate para construir vínculos basados en la armonía y el crecimiento espiritual.

En la Master Class:

Diferencia entre conexiones sexuales
El sexo como un pacto espiritual
El impacto de las alianzas nunca rotas
Zona Íntima Personal (ZIP)

Aquí, solo una fracción de lo que está dentro del libro

¡Gracias por tomarte el tiempo de leer esta carta y espero que nos encontremos en la Master Class muy pronto!​​​​​​​